
El anuncio de que TVE desplegará en Cataluña un canal de televisión íntegramente en catalán es una excelente noticia. Lo hace una entidad pública que en 1959 realizó la primera emisión en catalán desde Miramar (La ferida lluminosa). Y que en los años setenta programó un circuito catalán que albergó más de una osadía informativa. Ya en 1980, un grupo de trabajadores de TVE publicó un manifiesto que defendía la creación desde TVE de un canal en catalán. Pero los propósitos de Jordi Pujol y del PSOE eran otros. Uno quería un canal donde pudiera decidir lo que tocaba y no tocaba, y algunos sectores del partido en el Gobierno no querían que la televisión catalana fuera más allá de un muestrario antropológico. Ganó Pujol y salieron TV3 y el Canal 33 bajo tutela de la Generalitat. Por eso mismo es relevante que ahora Junts y ERC apoyen este proyecto desde los sillones que ocupan en el consejo de administración de RTVE. Vaciará La 2 de su parcial parrilla en catalán y la cobertura territorial será Cataluña.
