Se han hecho esperar y son menores de lo esperado. Pero han llegado y con imposiciones a Apple y Meta que van directamente contra su modelo de negocio. Las primeras multas del reglamento de servicios digitales (DMA, por sus siglas en inglés) han ascendido a 500 millones para el fabricante de los iPhone y el iPad y a 200 millones para la matriz de redes sociales como Facebook o Instagram. Las sanciones y las obligaciones sobre los gigantes tecnológicos llegan en plena negociación con Estados Unidos por la guerra comercial abierta por Washington y sobre unas empresas que han mostrado abiertamente su cercanía con la nueva Administración estadounidense, a la que han pedido ayuda que frene a la UE para no tener que acatar sus normas digitales.
