Desde el momento en que se enteró de la llegada de Lewis Hamilton a Ferrari con vistas a 2025, James Vowles, el ejecutivo de mayor rango en Williams, se obsesionó con Carlos Sainz. El ingeniero británico identificó al español como el candidato ideal para abanderar la refundación del equipo, que permanece en el podio de las escuderías más laureadas, siete títulos de pilotos y nueve de constructores, en esta nueva etapa de la formación de Grove (Gran Bretaña) sustentada por Dorilton Capital, un fondo privado de inversión, americano.
