El Gobierno de España anunció este jueves la cancelación de un contrato de 6,6 millones de euros para comprar 15 millones de balas a una empresa israelí para abastecer a la Guardia Civil. El contrato fue adjudicado por el Ministerio del Interior en octubre, meses después de que —a raíz de la masacre indiscriminada de civiles en Gaza— el presidente, Pedro Sánchez, prometiera en el Parlamento que España no iba a realizar “ninguna operación de compraventa de armas con Israel”. El expediente de contratación, sin embargo, siguió su curso hasta su publicación el viernes pasado. Este miércoles adelantó la noticia la Cadena SER. El escándalo del socio menor de la coalición, Sumar, y la necesidad de ser coherentes con las palabras de Sánchez y con su ejecutoria en relación a la guerra de Gaza han hecho reaccionar a La Moncloa. La duda por despejar es hasta qué punto Interior obró por su cuenta, sin informar al resto del Gabinete de la continuidad de un contrato políticamente tan delicado como ese.
