El Gobierno se prepara para el impacto que la guerra comercial que Donald Trump detallará a última hora del día en España puede tener en los sectores más expuestos a las represalias estadounidenses contra la UE con la excusa de la balanza comercial favorable a Bruselas. La alerta en La Moncloa es máxima desde hace semanas por las consecuencias que pueden tener en sectores muy expuestos a los aranceles como la agricultura, el vino y el automóvil, campos en los que España es una potencia mundial. Pedro Sánchez tiene previsto comparecer este jueves y transmitir una imagen de tranquilidad y de confianza tras recibir a varios representantes del tejido productivo, según fuentes gubernamentales. “Si se nos imponen estos aranceles, responderemos con decisión y nos defenderemos. Actuaremos con rapidez, proporcionalidad y unidad”, advirtió el lunes el presidente. “Estamos silentes porque estamos pendientes de lo que diga Trump. Máxima prudencia. A una reacción europea habrá que esperar casi con toda seguridad al jueves”, explican en la cúpula del Ejecutivo.
