“Las consecuencias serán nefastas para millones de personas en todo el planeta”. Primero, los efectos desastrosos en todo el mundo que van a tener los aranceles masivos decretados por Donald Trump para las importaciones de Estados Unidos. Por ahí ha comenzado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, el paso anunciado por Washington apenas unas horas antes. Con una cara muy seria, la alemana ha advertido de alimentos y medicamentos más caros, es decir, inflación; de dolor en los países más pobres; “del caos que se está creando”. Y ha avisado de que Europa responderá “si las negociaciones”, pero también ha lanzado una advertencia al resto del mundo: “No podemos absorber el exceso de capacidad mundial”. En plata, la UE no puede comprar todo lo que ahora no se vaya a vender en EE UU.
